Resulta alarmante que en la actualidad personas desconocidas, ajenas al entorno familiar, estén modelando el carácter, las prioridades, los valores y otros aspectos de nuestros hijos.
Como flechas en las manos del guerrero son los hijos de la juventud. Dichosos los que llenan su aljaba con esta clase de flechas. No serán avergonzados por sus enemigos cuando litiguen con ellos en los tribunales. Salmos 127:4-5
En la sociedad actual, nos enfrentamos a diversos desafíos relacionados con la identidad de género, la igualdad de sexos y el papel que Yehováh, el Creador, ha definido para los hombres en el hogar. Es crucial que dediquemos un momento a reflexionar sobre estos aspectos y tomar acciones al respecto.
La familia, diseñada inteligentemente por Dios, tiene la función de proporcionar un entorno propicio para el desarrollo integral de sus miembros, quienes deben alcanzar la madurez física, emocional, espiritual y social para enfrentar los desafíos de la vida en un mundo cada vez más hostil.
Hoy en día, se habla mucho acerca de la figura del influencer. Esta persona tiene la capacidad de influir en la opinión, comportamiento o decisiones de los demás, gracias a su reconocida autoridad en las redes sociales u otros medios de comunicación. Para lograr su propósito, el influencer debe construir una relación, aunque virtual, con sus seguidores y mantener su confianza.
Enfoquémonos ahora en la figura paterna como el principal influencer en el hogar. La gran mayoría de nosotros somos el resultado de las acciones, actitudes y modelos que presenciamos en nuestros padres durante nuestra infancia. Algunos de esos modelos fueron buenos, mientras que otros no tanto, pero todos nos influenciaron de alguna manera.
Resulta alarmante que en la actualidad personas desconocidas, ajenas al entorno familiar, estén modelando el carácter, las prioridades, los valores y otros aspectos de nuestros hijos. Esto es especialmente preocupante porque, aunque los influencers usen expresiones cariñosas como “mi gente”, “les amo”, “besitos”, etc., estas son simplemente palabras vacías que reflejan el anhelo de afecto de sus seguidores.
Solo aquellos que conviven diariamente con sus hijos pueden conocer realmente sus necesidades, debilidades, fortalezas, temores, sueños, y demás aspectos. La vulnerabilidad de los hijos en un entorno marcado por la tecnología, los medios de comunicación y las presiones sociales destaca la necesidad de que los padres asuman un papel más activo en el desarrollo y protección de sus hijos, brindándoles un amor genuino e incondicional y la orientación necesaria para enfrentar un mundo lleno de desafíos.
Erróneamente, hemos pensado que la responsabilidad de modelar el carácter y valores de nuestros hijos recae en los maestros de la escuela o los líderes de la iglesia (si asisten a alguna). Sin embargo, al entregar dispositivos electrónicos a nuestros hijos desde una edad temprana, estamos, de hecho, entregándolos en manos de influencers desconocidos presentes en las redes sociales, comerciales, programas de televisión y videos de YouTube.
No estamos llamados a ser simplemente amigos de nuestros hijos; tenemos una autoridad dada por el Creador como sus progenitores para dirigir e influenciar significativamente sus vidas. Esto va más allá de proporcionar dinero para satisfacer sus necesidades o caprichos; se trata de estar presentes física y emocionalmente, escuchando activamente sus necesidades y brindando el apoyo necesario en el momento oportuno.
El tiempo es un factor crucial en el desempeño del papel del padre como un poderoso influencer en el hogar. Cuando los hijos expresan una necesidad, no pueden esperar indefinidamente a que los padres estén disponibles para atenderles.
Aunque esto pueda no ser del agrado de muchos, si hemos asumido la noble tarea de formar vidas, es fundamental que estemos dispuestos a sacrificar nuestro tiempo y nuestros intereses personales para estar presentes y disponibles cuando nuestros hijos requieran nuestro afecto, apoyo y orientación. Este compromiso activo y constante es esencial para fomentar un entorno familiar saludable y seguro.
En resumen, más allá de proveer y proteger, el papel del padre es convertirse en el mayor influencer del hogar, creando constantemente contenido nuevo, compartiendo con sus seguidores y mostrando un genuino interés en el bienestar y desarrollo de sus hijos. Esta tarea demanda una entrega incondicional y un compromiso firme para guiar a los hijos basándose en las verdades expresadas en la Palabra de Yehováh, proporcionándoles así un crecimiento y desarrollo saludables, porque los hijos no esperan.
Cómo influir positivamente a nuestros hijos
Hemos entregados nuestros hijos a los influencer que hay en las redes sociales y demás medios de comunicación. ¿Pero acaso es eso correcto? Los padres son quienes tienen la responsabilidad primaria de influir en sus hijos. Conviértete en un papá influencer y equipa a tu familia para enfrentar el futuro que se avecina.