El plan de Bilam finalmente había dado resultado: Los varones de Yisrael, habían caído en las redes seductoras de las mujeres moabitas llegando a participar de los cultos idolátricos que estas practicaban, y así había apartado de sí, la protección de Yehováh. Ahora ellos mismos serían malditos por causa de sus acciones.
El Segundo Censo, realizado en los campos de Moab, en las cercanías de Jericó antes de cruzar el río Jordán, nos permite ver que la población de Israel se había mantenido a pesar del juicio sobre la generación que salió de Egipto, la cual era mayor de 20 años en ese momento.
Se incluye, al final de esta infografía, un cuadro comparativo de los dos censos y les animo a leer el tema polémico acerca de la cantidad de personas que salieron de Egipto realmente: https://www.unrudodespertar.tv/cuantos-salieron-de-egipto-realmente/
Otro aspecto a resaltar en esta porción de la Toráh, tiene que ver con la actitud de Moisés, respecto a pedir a Yehováh que fuera Él quien asignara a la persona que sería su sucesor. Moisés no busco que fueran sus hijos o sus familiares inmediatos quienes asumieran tal responsabilidad, lo que pone de manifiesto que realmente era un hombre humilde, vacío de sí mismo, que buscaba solamente el bien de Israel, a la vez que obedecía de Yehováh.
Acerca del Sacrificio Diario
Este era presentado al comenzar el tiempo de luz entre el amanecer y la tercera hora del día, como el primer sacrificio (aunque el día había comenzado desde el atardecer del día anterior) y el segundo sacrificio era presentado al final del día como el último sacrificio y así la oveja permanecía sobre el altar como ofrenda tamid – es decir: continua. Adicionalmente se debía ofrendar el incienso de la mañana y hacer el mantenimiento de las lámparas de la Menoráh: despabilar sus mechas, rellenar los recipientes de aceite, y reencenderlas. También se debía acercar una ofrenda de harina (pan), y realizar la libación (derrame) del aceite y del vino en las cantidades correspondientes a cada sacrificio.
La gente asistía a estos servicios, como lo testifican los apóstoles en Hechos 3:1, donde se narra que Kefa (Pedro) y Yohanán (Juan) subían al Templo a la hora de la oración, la novena… tiempo en el cual era presentado el sacrificio diario de la tarde. Aclaremos que la hora novena, corresponde a la media tarde, lo que para nosotros sería entre las 3 y las 5 de la tarde.
Finalmente tengamos en cuenta que estos sacrificios diarios, debían ser presentados independientemente del Festival que se estuviera celebrando y del Shabbat; todos los demás sacrificios u ofrendas ordenados en este capítulo eran adicionales.